Félix Maradiaga, exreo político y exaspirante presidencial de Nicaragua, afirmó, desde San José, Costa Rica, que como oposición continúan «con el proceso de organización de la resistencia cívica no violenta» desde el exilio.
El también presidente de la Fundación Libertad aseveró que la unidad de la oposición—la que no se ha podido concretar desde el 2018— es posible lograrla entre todas la fuerzas opositoras de Nicaragua».
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Sin embargo, sostuvo, en entrevista exclusiva con Artículo 66, que se debe de pensar en una «unidad en la acción, no una unidad vinculada a estar agrupados en la misma casilla o con una misma camiseta, porque debemos saber que no tenemos en el horizonte cercano ningún proceso electoral».
Remarcó que no se está pensando en ningún proceso electoral inmediato porque no hay condiciones electorales, puesto que afirma que «la dictadura está sumamente cerrada y eso hace que las alianzas que nosotros tenemos que consolidar tienen que considerar que el tema electoral no es relevante como sí lo fue en 2021».
«En 2021 fue una estrategia correcta procurar esa alianza electoral para desenmascarar a la dictadura y explicar a la comunidad internacional que Ortega no podía ganar las elecciones y que nos teníamos que unir alrededor de una candidatura única y por eso apresó a todos los precandidatos porque el dictador —Ortega— sabía que íbamos hacia ese acuerdo de un candidato o candidata única», recordó.
Enfatizó que en este momento se deben de fortalecer «la unidad en acción alrededor de la libertad de los presos políticos, de los procesos de justicia penal internacional; además de ejercer mayor presión internacional, a través de la búsqueda de sanciones, procesos de solidaridad democrática a los cientos de nicaragüenses que todavía tienen sus estatus migratorios pendientes en los diferentes países».
«Continúan procesos de unidad desde el exilio»
Por otra parte, el politólogo indicó que siguen los procesos de unidad con la oposición, realizando reuniones con comunidades de nicaragüenses en el exilio «para escuchar las ideas de la gente y tratar de fortalecer los lazos de comunicación de una oposición que está geográficamente dispersa por el destierro».
«Estamos haciendo esfuerzos para mantener viva la esperanza, lograr la libertad de los presos políticos y que haya justicia a través de un proceso de reconstrucción cívica de Nicaragua», subrayó el exreo político.
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Recalcó, además, que pese al exilio forzado de miles de nicaragüenses, debido a la represión por parte del régimen de Ortega, se debe de romper «con la tiranía de la distancia» y así poder conversar con los diferentes sectores.
«Se están estableciendo conversaciones con grupos organizados en España; nos reunimos con nicaragüenses en Suiza, y ahora estamos en Costa Rica, que se ha convertido, por ser el país vecino de nuestra patria —Nicaragua— en otro punto de concentración de grandes e importantes voces opositoras», remarcó.
A la pregunta que si la la falta de unidad ha hecho que Ortega haya recrudecido la represión en Nicaragua, el opositor lo negó, más bien afirmó que se debe de «tener muchísimo cuidado de no quitar el dedo en la llaga al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, que son los verdaderos culpables de la crisis económica, migratoria y de derechos humanos».
En cuanto a su llegada a Costa Rica, Maradiaga explicó que está en representación de Fundación para Libertad, para realizar capacitaciones sobre la importancia de las coaliciones, alianzas y procesos de diálogos internos de la oposición, «y así poder entender cuál puede ser la ruta estratégica para lograr los objetivos de la democracia».