La oficial del departamento de Rivas Anielka Rodríguez, quien se volvió viral en redes sociales después de pedir coimas y noviazgo al youtuber español Agustín Ostos en su paso por Nicaragua, acusa a su jefatura de «ensañarse con ella» afirmando que sus compañeros «han hecho cosas peores, pero ellos fueron premiados».
En un video que circula en redes sociales Rodríguez asegura que «fue una broma, un error lo comete cualquiera y todos nosotros lo tomamos como fregadera. Pero de todo, lo que menos me imaginé fue que la jefatura me despidiera, creí que solo lo tomarían como una sanción porque creo que no fue tan grave porque lo que hicieron fue darle más alas a las personas que andan tirándole al gobierno y a nosotros», dijo la exoficial en rechazo a su despido.
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«Estoy molesta con la actitud de la jefatura porque otras personas que han hecho y cometido delitos muy graves los han hasta promocionado y conmigo con una tontería de broma y humor ahí nomás tomaron esa decisión», continuó añadiendo.
Según la abogada Yonarqui Martínez, la exfuncionaria había atestiguado en contra del exprisionero político de la Isla de Ometepe Justo Rodríguez, quien fue condenado a tres años y dos meses en prisión por el supuesto delito de «obstrucción de funciones». Pero, en diciembre de 2021 fue entregado a sus familiares en estado parapléjico.
La defensora denunció que Anielka Rodríguez debería ser acusada y procesada por actos de corrupción ya que, «de manera vil y despiadada señaló a don justo y demás jóvenes de la Isla de Ometepe por delitos falsos. Anielka el tiempo siempre desenmascara las sinvergüenzadas. Funcionaria corrupta», expresó Martínez por medio de su cuenta de Twitter.
Rodríguez, ahora de 69 años, se dedicaba a la agricultura, pero fue involucrado por el régimen en altercados registrados en la comunidad Esquipulas, Moyogalpa, en la Isla de Ometepe, cuando oficiales agredieron a varias personas que se encontraban cerca de un parque conmemorando dos años de la rebelión de abril de 2018.
Según sus familiares, después de ser arrestado, fue brutalmente golpeado en las celdas de Ometepe y posteriormente trasladado a la Dirección de Auxilio Judicial, conocido como «El Nuevo Chipote», en Managua.
En las celdas de «El Chipote» Justo Rodríguez sufrió un derrame cerebral que le provocó pequeños coágulos de sangre por lo que fue intervenido quirúrgicamente para extraer los tres coágulos, esto generó que perdiera la capacidad de movilidad.