La profesora Maricela del Carmen Mora Barbosa, de 50 años, fue encontrada sin vida en el interior de su vivienda en el barrio Loma Verde, Tipitapa, con múltiples heridas de arma blanca. La principal sospechosa, según fuentes policiales, es su propia hija, una adolescente de 15 años. Un crimen que ha conmocionado al municipio de Tipitapa y ha puesto en vilo a las autoridades y a la opinión pública.
El asesinato ocurrió el jueves 22 de mayo por la tarde. Según reportan medios que cubren sucesos, la adolescente declaró inicialmente que salió de la casa a las 3:00 p. m. rumbo al gimnasio y que, al regresar cerca de las 7:00 p. m., encontró a su madre tirada en el suelo ya inerte. A su tía le habría dicho que la mujer «posiblemente se tropezó y cayó sobre el abanico». Sin embargo, esa versión fue descartada por los agentes y familiares, al constatar que el cuerpo presentaba múltiples heridas de arma blanca en el pecho y otras partes.
Según informes recabados por medios locales, la escena del crimen reflejaba violencia extrema, y la Policía, a partir de inconsistencias en el relato de la adolescente y evidencias encontradas en la vivienda, ha centrado la investigación en ella. Una fuente policial dijo a medios oficialistas, que son los únicos que tienen acceso a este tipo de coberturas, que «hay elementos suficientes para sospechar de la participación de la hija», aunque no se ha emitido acusación formal mientras se recopilan pruebas.
Vecinos del barrio Loma Verde describieron a Maricela Mora Barbosa como una mujer dedicada y querida por su comunidad. Era maestra del Colegio Gaspar García Laviana, reconocida por su entrega a los estudiantes. Según testimonios, madre e hija mantenían discusiones frecuentes, lo que ha generado especulaciones sobre posibles tensiones familiares.
Un elemento crucial surgido en las últimas horas es que, según el diario La Prensa, la profesora logró enviar un mensaje de auxilio a través de un grupo de WhatsApp de padres de familia antes de morir, lo que provocó que algunos alertaran a la hija y a la Policía. Sin embargo, al llegar a la vivienda, los agentes solo pudieron confirmar el asesinato.
Mientras la investigación sigue su curso, el vecindario permanece consternado. La Policía mantiene bajo reserva los avances del caso, y por la edad de la sospechosa, se manejan los procedimientos con el debido carácter reservado. Por ahora, los agentes se concentran en determinar si efectivamente fue la hija de la profesora quien terminó con la vida de su madre, o si hay otros elementos que permitan esclarecer este suceso.
La pena por «parricidio» pero bajo justicia penal adolescente
El asesinato de la profesora Maricela del Carmen Mora Barbosa continúa bajo investigación, con la atención puesta en su hija adolescente como principal sospechosa. De comprobarse que la menor es la autora del delito, se trataría de un caso de parricidio, figura contemplada en el Código Penal de Nicaragua como el homicidio cometido por un ascendiente, descendiente, hermano, cónyuge o conviviente en unión estable, sancionado con penas que oscilan entre 15 y 30 años de prisión, e incluso la posibilidad de cadena perpetua revisable cuando concurren agravantes como alevosía o ensañamiento.
No obstante, dado que la sospechosa es menor de edad, el caso estaría regido por el Código de la Niñez y la Adolescencia, el cual establece un sistema especializado de justicia penal para menores, con una pena máxima de seis años, sin importar la gravedad del delito.
