«La suerte es loca y a cualquiera le toca», reza el popular refrán. Pues en marzo de este año la suerte le tocó a la puerta al representante de la dictadura de Ortega y Murillo en la embajada de El Salvador, Luis Alberto Molina Cuadra, cuando fue anunciado como el ganador de una de las cinco camionetas que sorteaba Gasolineras Uno en Nicaragua.
El embajador de Daniel Ortega y Rosario Murillo posó frente a las cámaras fotográficas, con una sonrisa de oreja a oreja, cuando recibió las llaves del Nissan Kicks el pasado 23 de marzo, fecha en que la empresa publicó las imágenes de Molina Cuadra con su nueva camioneta valorada en más de 20 mil dólares.
Al diplomático de Ortega en El Salvador, como ganador de la camioneta, Gasolineras ONU le da el beneficio de «entrega con tramite de placa», es decir, que se realizarán todas las gestiones para que la placa sea registrada a nombre del diplomático.
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El siete de septiembre de 2021 el régimen de Nicaragua designó Molina Cuadra, entonces viceministro de Relaciones Exteriores para los países de Europa del Este y Asia Central, en el cargo de ministro consejero en El Salvador con funciones consulares, según un Acuerdo Ministerial del canciller Denis Moncada Colindres.
El cuatro de octubre de ese mismo año fue «ascendido» a embajador de Nicaragua ante el Gobierno de Nayib Bukele, según el Acuerdo Presidencial No. 173-2021, publicado en La Gaceta No. 183 del cinco de octubre de 2021.
Antes de ser enviado a El Salvador, el diplomático también fue embajador de Nicaragua en Rusia y concurrente en la región separatista georgiana de Abjasia, en sustitución de Maher Hani Rimawi, un palestino nacionalizado nicaragüense.
El funcionario orteguista también se desempeñó como asesor de la Presidencia del dictador Daniel Ortega para asuntos de la Federación de Rusia y Bielorrusia.