A un mes del asesinato de Miriam Gutiérrez Colindres, originaria de la ciudad de Condega, en el departamento de Estelí, sus familiares siguen esperando que le caiga todo el peso de la ley al autor crimen que estremeció a la región norte. A la mujer se le privó de la vida al recibir más de 15 puñaladas. El suceso ocurrió en Guanaca, una localidad de Matagalpa.
«Estamos esperando que nos digan cómo va el caso porque es hasta la fecha y no nos dicen nada. ¿Cómo es posible que el asesino ande libre como si nada? Nosotros aquí estamos con miedo, a que nos venga a hacer algo porque lo estamos denunciando», explicó una de las familiares que por temor solicitó anonimato.
Detalló que al momento del crimen, la víctima estaba en Matagalpa porque ella tenía su trabajo y de paso iba a ver a su hija, «pero lo que encontró, fue la muerte». «Nos sentimos muy angustiados con esta situación, hay veces que no podemos dormir porque puede venir ese hombre y nos hace daño», comentó el familiar.
Sin pronunciarse
Hasta el momento, ninguna autoridad se ha pronunciado sobre el caso. Los parientes de Gutiérrez Colindres creen que el asesino huyó hacia Estados Unidos para evadir la justicia. Ellos esperan que con esta denuncia pública, los altos mandos de la Policía sigan presionando para que el caso no quede en la impunidad.
«Esto no puede quedar así, no fue un animal a quien mató, fue a mi hermana y exigimos justicia que les caiga todo el peso de la ley, las hijas psicológicamente están mal porque a cada rato que ven la foto de su madre se ponen a llorar y eso los afecta emocionalmente. Nos preguntan: ¿Quién la mató? y les tenemos que decir que aún siguen investigando», relató otro familiar de la fallecida.
Mirian Gutiérrez Colindres era una mujer que se dedicaba al trabajo doméstico para proveer a su familia las necesidades básicas. Era también el sustento de su mamá, quien ahora quedó sin ese apoyo económico.
¿Policía de Matagalpa sin interés?
Cada vez que los familiares llegan a preguntar por el caso de la mujer asesinada los agentes policiales solo les dicen que están investigando, que no se preocupen porque andan tras la pista del asesino. Los demandantes no les creen, porque ni información les quieren brindar cada vez que llegan a la estación policial.
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«Estamos aburridos de llegar a esa delegación a preguntar por el caso; siempre nos dicen lo mismo y lo mismo; nada nuevo, que están investigando. Los llamamos a sus celulares y no nos contestan las llamadas. Ya no hallamos qué hacer para que se haga justicia», expresan los familiares.
De manera extraoficial se conoció que una persona que al principio fue detenida y acusada por el crimen fue dejado en libertad porque no había los suficientes elementos para creer que estaba involucrado.
Por: Voces Unidas
