El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo sentará este martes, 17 de enero, en el banquillo de los acusados a las ciudadanas francesas Jeannine Horvilleur Cuadra y Ana Álvarez Horvilleur, esposa e hija respectivamente del opositor Javier Álvarez, así como a su yerno Félix Roiz Sotomayor.
La madre e hija, junto a Roiz Sotomayor, están siendo acusados por la justicia sandinista por los delitos de conspiración para cometera la integridad nacional y propagación de noticias falsas, dos instrumentos jurídicos utilizados para reprimir, encarcelar y silenciar las voces disidentes y críticas del régimen Ortega-Murillo.
El proceso penal en contra de estas tres personas está programado para este martes en el Juzgado Quinto de Distrito de lo Penal, a cargo del juez Félix Ernesto Salmerón, según filtró una fuente a Artículo 66.
Las mujeres, de nacionalidad nicaragüense y francesa fueron detenidas por la Policía el pasado 13 de septiembre de 2022, un día antes de las festividades patrias, cuando buscaban al esposo y padre de ambas ciudadanas, quien logró salir a tiempo de Nicaragua para solicitar protección internacional.
El opositor denunció entonces que agentes de la Policía irrumpieron en su vivienda de manera arbitraria y sin orden judicial en su búsqueda, al no encontrarlo los agentes procedieron a llevarse a su esposa e hija.
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En octubre pasado, el opositor recalcó que ninguno de sus familiares ha cometido delito y señaló que la dictadura los encerró por tener vínculos con él. Álvarez consideró entonces que “esta nueva modalidad, de detener a los familiares de un opositor, al no encontrarle, es una gravísima agresión y vulneración de los derechos humanos más elementales”, al transferir una supuesta culpa a sus familiares directos”.
Álvarez también dijo a la agencia de noticias Reuters que su hija y su esposa habían sido detenidas como una forma de atacarlo. «Las detuvieron por venganza porque no me encontraron», sostuvo.
En el 2022 el régimen emprendió enfiló la represión contra dirigentes de organizaciones políticas, activistas y opositores, pero también contra familiares de quienes se encuentran en el exilio.