El régimen de Nicaragua y la República Popular China celebraron el primer aniversario del restablecimiento de las relaciones diplomáticas luego de romper relaciones con Taiwán. Ambas delegaciones se reunieron en un concierto cultural y afirmaron que este ha sido un año que «marca en la historia de Nicaragua».
«Estamos dando inicio a estas celebraciones por el primer aniversario del restablecimiento de las relaciones plenas entre la República Popular China y la República de Nicaragua con un lindo concierto que nos dedicó el maestro Ramón Rodríguez, el coro de niños que ha venido trabajando con los proyectos de coros estudiantiles del Ministerio de Educación, la Orquesta Sinfónica Juvenil Rubén Darío, que ha recibido el apoyo de la República Popular China dotándolos de instrumentos para estos jóvenes», expresó el hijo de la pareja presidencial, el sancionado Laureano Ortega Murillo, asesor presidencial para la Promoción de Inversiones, Comercio y Cooperación Internacional.
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«Para nosotros es una fecha muy especial. Ha sido un año de trabajo intenso entre intercambios, cooperación, solidaridad en todos los momentos con Nicaragua y que ha sido recíproco», agregó el representante del régimen.
El embajador de la República Popular China en Nicaragua, Chen Xi, agradeció la realización del espectáculo que permite unir ambas culturas. «La confianza política se ha consolidado cada día más, las cooperaciones de beneficio mutuo se han desarrollado fructíferamente, los intercambios culturales y humanísticos se han desenvuelto dinámicamente», añadió.
Por su parte, el titular del Ministerio de Hacienda y Crédito Público, Iván Acosta, también se encontraba en el encuentro y refirió que «se han iniciado las mejores relaciones entre dos pueblos, dos países, dos partidos como es el Frente Sandinista de Liberación Nacional y el partido comunista chino con el cual se está trabajando un programa de cooperación en todos los campos, donde hemos priorizado el acuerdo de cosecha temprana y la negociación del Tratado de Libre Comercio, que esperamos el próximo semestre estar concluyéndolo». Acosta, manifestó que todo lo mencionado anteriormente abre grandes oportunidades para Nicaragua.
El régimen Ortega-Murillo estableció relaciones diplomáticas con China comunista tras romper lazos con Taiwán. Previo a esta ruptura se benefició de los diversos programas y proyectos que la isla ejecutaba en el país. Además, la dictadura ordenó la expulsión de la misión diplomática en Nicaragua, la expropió de su bienes y los entregó al gigante asiático para que instalaran la embajada en el país.
Gustavo Porras, presidente de la Asamblea Nacional, expresó que «realmente sentimos que ha sido una hermandad y acercamiento de toda la vida. Es estrechar los vínculos entre dos revoluciones que buscan la prosperidad, la paz y el camino solidario».