En el Día de Todos los Santos, el excura trapense y misionero católico colombiano, hermano Pablo María Diez, pidió a Jesús que interceda por la liberación de monseñor Rolando Álvarez Lagos, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Siuna.
El obispo Álvarez permanece bajo custodia policial desde el cuatro de agosto, hace 89 días. Hasta la madrugada del 19 de agosto, permaneció cautivo en la Curia Episcopal de Matagalpa, ese día fue sacado con violencia junto a un grupo de religiosos. Posteriormente, fue trasladado a la casa de su familia en Managua. Desde esa fecha no se tiene información del jerarca.
«Hoy Día de Todos los Santos, con el poder de Dios pido que interceda por monseñor Rolando (Álvarez), de Nicaragua, que nadie sabe dónde está, pero tu Sagrado Corazón de Jesús tu sabes dónde está y tu vas a interceder ante el Padre Eterno y el Espíritu Santo para que se muevan varias partes de la Iglesia católica a indagar para que sepamos dónde está monseñor», dijo el religioso en un video publicado en sus redes sociales.
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«Elevo mi plegaria al cielo, me uno a todos los Santos del cielo y digo: Padre Santo, Padre bueno, que todas estas voces, para que consuelen en este momento a monseñor, para que le dé a monseñor Rolando (Álvarez) toda la fuerza del Espíritu Santo, para que el Señor lo bendiga, para que el Señor lo restaure, lo regenere y lo renueve y pido a aquellos que tienen poder que por favor lo saquen de donde está», añadió.
El pasado 19 de agosto, tras el asalto al Palacio Episcopal de Matagalpa, el hermano Pablo María hizo un llamado a «todos los fieles católicos del mundo» para que se unieran en oración por la persecución de la Iglesia en Nicaragua.
«Pidamos para que el Santo Padre alce su mano, hay dolor, hay persecución. Mi corazón se llena de dolor y de tristeza. Son lágrimas que salen de mi alma, son cosas que me enternecen. Señor, Cristo Jesús, católicos, cristianos del mundo entero, oremos por nuestra Iglesia, oremos», dijo en ese momento el misionero.
Monseñor Rolando Álvarez es el único de 12 religiosos encarcelados que permanece en su vivienda con custodia policial, pero con las mismas restricciones y la vigilancia en todo momento. Además, tampoco se ha presentado oficialmente una acusación contra el purpurado. Los otros once religiosos fueron señalados, entre otros delitos, por conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional.
