El régimen de Nicaragua canceló de manera oficial 37 Organizaciones No Gubernamentales (ONG) extranjeras por «estar en abandono», entre las que se encuentran asociaciones de Estados Unidos, Alemania, Holanda y Costa Rica.
La Dirección General de Registro y Control de Organismos sin Fines de Lucro del Ministerio de Gobernación, establece en su escrito publicado en La Gaceta que las organizaciones «han incumplido sus obligaciones conforme a la ley, establecidas en el artículo 37 numerales 1, 2 ,3 y 4 de la Ley N°. 977».
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El escrito también establece que las oenegés canceladas supuestamente no reportaron por períodos de entre 05 hasta 30 años conforme las leyes que los regulan, por lo que señala que se encontraban acéfalas. Asimismo, indica que no presentaron lo estados financieros conforme periodos fiscales, con desgloses detallados de ingresos y egresos, balanza de comprobación, detalle de donaciones.
Entre las ONG canceladas destacan la Asociación Alas de Socorro, Asociación Vida y Centro para la Rehabilitación Internacional, originarias de Estados Unidos y dedicadas a la ayuda social en el país centroamericano. Además de nueve españolas, una de Costa Rica, una Holanda y una de China.
Recientemente Ortega canceló otras 20 entidades de origen extranjero. Todas señaladas de violar la Ley 1040, Ley de Regulación de Agentes Extranjeros; y la Ley 977, Ley Contra el Lavado de Activos, el Financiamiento al Terrorismo y el Financiamiento a la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva.
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En las recientes cancelaciones figuran la Sociedad Internacional de Telecomunicaciones Aeronáuticas dedicada a las fuerzas armadas, el Instituto Internacional de Agricultura, el Centro Nicaragüense de Desarrollo y Ciet Internacional y Asoción Planet Aid, todas de Estados Unidos. Mientras que en las españolas destacan la Fundación San Agustín de Nicaragua, Fundación Engelmajer y la Fundación Alfasol de Cooperación y Desarrollo.
Con la reforma aprobada a la Ley referida a las ONG, el régimen de Ortega-Murillo le otorgó al Migob el poder absoluto de despojar de la personalidad jurídica a las organizaciones mediante acuerdos ministeriales, sin necesidad de pasar por el Ejecutivo.
El Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más ha denunciado que «el propósito de estas cancelaciones es ejercer un control absoluto y silenciar a la sociedad; perseguir a quienes opinan diferente y establecer un pensamiento único, violentando los derechos humanos del pueblo nicaragüense».
