Hugo Rodríguez, quien fue nominado por el gobierno de los Estados Unidos como embajador para Nicaragua y sustituiría, en caso de ser aprobado su postulación, a Kevin Sullivan en la delegación diplomática en Managua; despertó la molestia del régimen de Daniel Ortega con sus declaraciones ante el Senado del país norteamericano, en donde se comprometió a continuar denunciando los abusos de poder de la dictadura.
«Me comprometo a trabajar con el Congreso, colegas interinstitucionales y socios internacionales para presionar por el retorno a la democracia, el respeto de los derechos humanos y la libertad de los presos políticos en Nicaragua», aseguró el postulante ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
Además, el diplomático norteamericano indicó que «si me confirman como embajador me comprometeré con voces de toda la sociedad nicaragüense para compartir nuestra visión de crecimiento económico inclusivo, como lo expresó el presidente (Joe Biden) en la reciente Cumbre de las Américas, en Los Ángeles (California)».
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«Buscaremos apoyar a los grupos de la sociedad civil que brindan servicios esenciales en el área de salud, educación y alivio de la pobreza, incluidas las organizaciones que ha apuntado el Gobierno de Nicaragua», aseguró el candidato a embajador del país norteamericano.
Asimismo, Hugo Rodríguez planteó que la expulsión de Nicaragua del CAFTA-DR (Tratado de Libre Comercio con Centroamérica y República Dominicana) «es una herramienta potencialmente muy poderosa» y algo que «debe ser considerado seriamente» ante el agravamiento a las violaciones a derechos humanos.
El funcionario estadounidense, en sus declaraciones, también se refirió a las elecciones presidenciales de 2021 en las que Daniel Ortega fue electo presidente por cuarta vez consecutiva y su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta por segunda ocasión. Rodríguez señaló que desde entonces la dictadura ha privado a los nicaragüenses de cualquier opción política real, debido a que la administración orteguista se encargó de aniquilar a toda la competencia electoral.
Remarcó que Ortega-Murillo «cerró el espacio cívico a un ritmo alarmante» con la eliminación masiva de al menos 900 organismos no gubernamentales, universidades y asociaciones en menos de seis meses, lo que implica un «clima de represión y miedo» en la población nicaragüense.
De igual forma, reiteró que «Estados Unidos se ha pronunciado en contra de estos abusos» y de confirmarse como embajador de Nicaragua lo seguirá haciendo.
Hugo Rodríguez subrayó que las acciones y declaraciones del país norteamericano no es injerencia extranjera en los asuntos internos del país, sino que es «un compromiso bajo la Carta Democrática Interamericana que tanto Estados Unidos y Nicaragua firmaron».
Demanda acciones a nivel internacional
Ante la consulta del senador norteamericano, Bob Menéndez, sobre las acciones que el propondría a nivel internacional para evitar aún más el agravamiento de la crisis sociopolítica de Nicaragua , el candidato a embajador alegó que se necesita «movilizar las voces en toda la región y todo el mundo para denunciar los abusos contra los derechos humanos, denunciar las acciones antidemocráticas que está tomando el Gobierno de Ortega, y debemos exigir la liberación inmediata de los 190 presos políticos».
«Me comprometo a trabajar con usted y el Consejo de Derechos Humanos o nuestros socios en Europa y Canadá también buscar su voz y acción en forma de sanciones para unir nuestros esfuerzos para resaltar los abusos y para aislar al régimen», dijo.
Además, «abogaré por un cambio de rumbo para que el pueblo nicaragüense pueda trabajar para recuperar su democracia, mantener a sus familias y recuperar la esperanza para su futuro», concluyó Rodríguez.