Una fuente cercana a la familia de los líderes universitarios Lesther Alemán y Max Jerez reveló que las condiciones carcelarias contra los presos políticos «han mejorado» respecto a la alimentación y las horas de sol, no obstante los interrogatorios, tratos inhumanos y la falta de una atención médica especializada persiste.
«Se encuentran estable dentro de lo que cabe. Lesther y Max han recuperado un poquito de peso, en comparación a las anteriores visitas se miran mejor. Ellos comentan que ahora los sacan regularmente a tomar el sol y que los interrogatorios siguen», indicó la fuente en condición de anonimato al equipo de Artículo 66.
Agregó que los oficiales de la Dirección de Auxilio Judicial, conocida como «El Nuevo Chipote», cuestionan a los jóvenes opositores acerca de lo que están comiendo o que si salen que van a hacer de su vida.
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En el caso de Max Jerez, el rehén de la dictadura se encuentra fuerte y hasta el momento no ha presentado enfermedades en 385 días de encierro. Mientras que Lesther Alemán continúa con reflujo, taquicardias y problemas en unas de sus piernas.
Asimismo, la fuente señaló que a raíz de la divulgación de los retratos hablados de algunos presos políticos y «toda esta denuncia» han habido pequeños cambios dentro del penal.
Se conoce que los médicos de El Chipote han estado atendiendo la salud de Alemán. El joven opositor toma medicamentos para el reflujo y una pastilla diaria para tratar la taquicardia que presenta, sin embargo continúa sin recibir una diagnóstico exacto sobre la afectación en su pierna.
Tras 42 días de incomunicación, los dirigentes de la Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN) lograron ver a su familiares durante la novena jornada de visitas que el régimen de Daniel Ortega autorizó — entre el viernes 22 al domingo 24 de julio — a los opositores encarcelados en el Chipote.
Además, la fuente denunció que en esta ocasión las «requisas fueron bastante exhaustivas, de tal manera que fueron incómodas, pues se les revisó todo a los familiares, pero mucho más que las otras veces».
385 días han pasado, luego que el cinco de julio de 2021, la Policía orteguista detuvo de forma arbitraria a Lesther Alemán y a Max Jerez. Ambos jóvenes fueron sentenciados a 13 años de prisión cada uno por el supuesto delito de «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional».
