Monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, cuestionó que la «prédica de amor» de la que se ufana la dictadura de Daniel Ortega quedó «lejos» de los hechos, tras expulsar a las hermanas de la Asociación Misioneras de la Caridad.
«Si es verdad que “el amor perfecto expulsa el temor” (1 Jn 4,18), también es verdad que el temor mezquino expulsa el amor», expresó el religioso a través de su cuenta de Twitter.
Noticia relacionada: Llegan a Costa Rica Hermanas de la Caridad expulsadas por Ortega
En referencia a las acciones de la dictadura orteguista contra las misioneras, agregó que «solo corazones enfermos y mentes oscuras son capaces de expulsar el amor y expulsar el amor es rechazar a Dios».
El miércoles, seis de julio, monseñor Manuel Eugenio Salazar, obispo de la Diócesis de Tilarán en Liberia, Costa Rica, informó que las Hermanas de la Caridad llegaron al vecino país de sur.
«Bienvenidas Hermanas de la Caridad de Madre Teresa de Calcuta. Es un honor para nuestra Diócesis de Tilarán – Liberia que sus plantas pisen estas tierras. Oramos por la Iglesia en Nicaragua, por sus obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas», escribió el obispo en su cuenta de Facebook.
La aplanadora de diputados sandinistas en la Asamblea Nacional ilegalizó a la Asociación Hermanas Misioneras de la Caridad, orden creada por Madre Teresa de Calcuta.
Noticia relacionada: Misioneras expulsadas de Nicaragua vivieron «momentos de angustia, temerosas de su integridad física»
El 30 de junio, la Policía al servicio del régimen de Daniel Ortega incrementó la vigilancia en el Hogar Inmaculado Corazón de María, en Granada, donde se encontraban las religiosas y fue hasta el miércoles que «escoltadas» por la Policía de Ortega salieron del país.
Según monseñor Manuel Eugenio Salazar, desde que fue anunciada la cancelación de la personalidad jurídica de la Asociación Misioneras de la Caridad, las religiosas vivieron «momentos difíciles, de zozobra, de angustia, temerosas de su integridad física».