Monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, denunció la noche de este jueves que la Policía orteguista le dio persecución durante todo este día, siguiendo cada “movimiento” que él hacía. Debido a esta situación, el líder religioso anunció que hará ayuno indefinido, de agua y suero.
“Lamentablemente en esta ocasión me dirijo a ustedes (feligresía) para compartirles que hoy (jueves 19 de mayo) he sido perseguido durante todo el día por la Policía sandinista, desde la mañana hasta esta hora de la noche, en todo momento, durante todos mis movimientos del día”, manifestó Álvarez a través de un video publicado por la Diócesis de Matagalpa en Facebook.
El líder religioso relató que fue en horas de la tarde de este jueves, cuando se encontraba en la casa de su sobrina, que enfrentó a los agentes policiales y les preguntó por qué lo perseguían, a lo que ellos le contestaron que “obedecían órdenes”.
“Les he dicho que se comunicaran con el primer comisionado para informarle que ya por hoy era suficiente esta persecución, que esperaba después de cenar en casa de mi sobrina, que ellos también pudieran estar descansando”, declaró Álvarez.
“Lejos de suceder lo que realmente creí que con una básica y mínima voluntad de sentido común de parte de las autoridades superiores de la Policía y del gobierno iba a suceder, realmente lo que aconteció fue lo contrario. Entraron en mi círculo de privacidad familiar, llegaron a mi casa privada, familiar, paternal, maternal, poniendo en riesgo la seguridad de mi familia”, narró Álvarez.
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Añadió que ante este escenario se vio obligado a dirigirse a la Parroquia Santo Cristo de Esquipulas, ubicada en Las Colinas, Managua, donde monseñor Carlos Avilés lo acogió como “huésped de esta parroquia”.
Suspenderá ayuno hasta que dejen de asediarlo
La situación agravante que vivió este jueves monseñor Álvarez, lo obligó a someterse a un ayuno de agua y suero desde la noche de este día, y aseguró que lo suspenderá hasta que la Policía, a través del presidente de la Conferencia Episcopal o el vicepresidente, le hagan saber que van a respetar su círculo de privacidad familiar y cesarán el hostigamiento.
“Pido al divino espíritu que los ilumine y al pueblo santo de Dios de las Diócesis de Matagalpa y Estelí, y a todos los que quieran unirse a mí a este ayuno indefinido, que lo hagan, que vayan a partir de mañana a las parroquias de las dos diócesis que en este momento estoy pastoreando”, solicitó Álvarez.
El prelado añadió que durante esta jornada de asedio y persecución en su contra, los uniformados se justificaron aduciendo que lo hacían por su “seguridad”, “pero ya sabemos que la inseguridad de este país es precisamente la Policía, es decir, los que nos hacen sentir inseguros con esa persecución son ustedes hermanos policías”, declaró.
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El pasado 27 de marzo, Álvarez ya había denunciado la persecución de la Policía. En ese momento declaró que fue seguido e interceptado “de manera brusca, arbitraria y con lujo de prepotencia” por cuatro agentes de la patrulla 1169 del puesto policial de San Benito.
“Yo desde aquí estaré orando ante el santísimo, estaré celebrando la eucaristía y elevando mi súplica al Señor para que pueda cesar esta situación de hostigamiento durísima y cruel para todos nosotros”, finalizó el sacerdote en su video.
#Nicaragua. Le ofrezco mi solidaridad y mi cercanía fraterna a mi hermano, Mons. Rolando Álvarez, Obispo de Matagalpa, quien está siendo hostigado por la Policía. Me uno a su oración, pidiéndole al Señor que lo proteja con la fortaleza de su Espíritu.
— Silvio José Báez (@silviojbaez) May 20, 2022
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Cenidh exige respeto
Tras conocer la noticia, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) se solidarizó con el líder religioso y exigió a la dictadura de Daniel Ortega respetar la labor pastoral del sacerdote, así como su integridad física y la de su familia. “Desde Cenidh respaldamos a monseñor Álvarez. No más persecución”, escribió el organismo en su Twitter.
Asimismo, monseñor Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua mostró su cercanía con Álvarez ante el hostigamiento policial. “Me uno a su oración, pidiéndole al Señor que lo proteja con la fortaleza de su Espíritu”, señaló Báez.