Honduras fue el único país centroamericano que votó en contra de la resolución aprobada este jueves en el Consejo Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en el que se dio luz verde a la creación de un mecanismo compuesto por expertos internacionales e independientes para que el régimen de Daniel Ortega rinda cuentas «por las graves violaciones ocurridas desde 2018 en Nicaragua».
El Gobierno de Xiomara Castro se sumó a Venezuela, Rusia, China, Cuba, Bolivia y Eritrea, que votaron en contra de la adopción del mecanismo. Esta fue la primera votación del nuevo gobierno hondureño, encabezado por Xiomara Castro, en asuntos relacionados con Nicaragua.
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Para la presidenta de la Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, la acción del país vecino fue sorpresivo porque en sesiones anteriores, Honduras se había abstenido.
La abogada señaló que la decisión de Xiomara Castro de apoyar a los dictadores de Nicaragua la «alinea» con los gobiernos de Cuba y Venezuela. «Esto hace pensar que definitivamente hay movimientos en el eje Rusia, Cuba y Venezuela. El apoyo de Honduras es una conquista (de Nicaragua) a última hora».
«Pensábamos que mínimo sería una abstención de Honduras como en otras sesiones, pero no sucedió así», señaló Núñez. Además, dijo que esto pesa en el contexto centroamericano y regional. «Nos hubiera gustado que hubiese habido unanimidad como conocimiento de causa del país vecino», recalcó la abogada en entrevista con Artículo 66.
Sigue los pasos de Juan Orlando Hernández
Por su parte, el abogado Gonzalo Carrión, presidente del Colectivo de Derechos Humanos Más, expresó que el voto de la representación de presidenta Xiomara Castro a favor de Ortega le da continuidad a la posición del exmandatario Juan Orlando Hernández, actualmente preso y próximo a ser extraditado a Estados Unidos.
«Juan Orlando Hernández mantuvo con su voto en los organismos internacionales, una estrecha relación de apoyo y alianza con Daniel Ortega. Así que la actitud de la señora Castro es una continuación de los que venía haciendo el antiguo presidente, no hay ninguna diferencia», indicó Carrión.
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El defensor dijo que pese a ese voto favorable al régimen no pierde la esperanza que pronto rectifiquen y respalden la condena de los nicaragüenses contra la dictadura por las violaciones a los derechos humanos. «No renunciamos a la posibilidad de que el nuevo gobierno (de Honduras) tenga conducta más coherente con los derechos humanos, porque el nuevo gobierno se pronuncia como progresista, lo que significa que está a favor de los derechos humanos», remarcó.
Agregó que es de «contrasentido bárbaro que una administración que dijo que iba a gobernar de manera diferente y en respeto a los derechos humanos e identificarse con los pueblos oprimidos, pero ese voto se identifica con el opresor».
Con este apoyo a Daniel Ortega, el país hondureño se integra a un grupo reducido de países que apoyan a Nicaragua y no condenan la grave violación a los derechos humanos.
El Gobierno de Nicaragua rechazó la resolución dictada este jueves, 31 de marzo, en la que el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó la creación de un mecanismo compuesto
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Por otra parte, Cuba volvió a afirmar su apoyo a Nicaragua y envió ánimo a Ortega a «seguir adelante, a pesar de las amenazas la retórica agresiva, las medidas coercitivas unilaterales y las medidas hostiles de algunos mecanismos y órganos de derechos humanos, incluyendo esta resolución políticamente motivada».
Pese a los alegatos, la resolución «Promoción y protección de los derechos humanos en Nicaragua» que manda a crear dicho mecanismo para investigue a Ortega fue aprobada.