El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas recibirá este miércoles de parte de la Alta Comisionada, Michelle Bachelet, el informe anual sobre los abusos de la dictadura de Daniel Ortega contra los derechos fundamentales de los nicaragüenses.
El documento, que fue divulgado días antes de la presentación oficial en el pleno del Consejo de Derechos Humanos, en una versión en inglés, incluye un reporte detallado sobre los encarcelamientos de opositores, el aniquilamiento de la opción electoral, los crímenes contra las comunidades indígenas del país, la penalización del derecho a decidir de las mujeres y los ataques contra los medios de comunicación.
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En el inciso sobre restricciones a la libertad de expresión, Bachelet denuncia un «marco legal excesivamente restrictivo, hostigamiento y detenciones arbitrarias de periodistas» por parte de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo. «El derecho a la libertad de expresión que afecta a los medios de comunicación ha sido severamente violado en Nicaragua», agrega la Alta Comisionada de la Naciones Unidas y expresidenta de Chile en su reporte.
«OACNUDH registró 40 casos de intimidación, amenazas, criminalización y campañas de desprestigio contra periodistas o trabajadores de los medios por parte de funcionarios del Estado y dos casos de medios de comunicación que fueron objeto de allanamientos por parte de la policía, así como cinco casos de detención arbitraria de periodistas, tres de los cuales permanecía en prisión en el momento de redactar el presente informe», detalla el documento de más de 15 páginas.
Igualmente denuncia la embestida judicial y las citatorias de la Fiscalía General de la República contra unos 47 periodistas, directores y propietarios de medios de comunicación, algunos de los cuales tuvieron que salir de Nicaragua para resguardar su seguridad. «Varios periodistas y trabajadores de los medios de comunicación tuvieron que salir de Nicaragua en busca de protección, debido a las amenazas del Ministerio Público de acusarlos penalmente, luego de citarlos a declarar en relación con una investigación contra la Fundación Violeta Barrios de Chamorro. El ACNUDH documentó 15 casos de este tipo (contra 13 hombres y 2 mujeres), aunque las cifras reales pueden ser mayores, ya que fuentes de la sociedad civil alegan que hay más de 45 casos».
Segundo allanamiento a Confidencial y confiscación de La Prensa
El informe de Michell Bachelet también abarca las denuncias de allanamiento al medio digital Confidencial, así como la amenaza de criminalización contra el periodista Carlos Fernando Chamorro; y la confiscación de facto de las instalaciones del diario La Prensa.
«El 20 de mayo, la policía allanó las oficinas de tres medios de comunicación dirigidos por Carlos Fernando Chamorro, incautó equipos y detuvo temporalmente a un camarógrafo sin orden judicial. En junio, el Sr. Chamorro anunció que había salido del país para evitar ser arrestado. El Ministerio Público emitió una orden de arresto en su contra el 2 de septiembre por lavado de dinero», detalla el escrito de Bachelet.
Sobre la confiscación contra La Prensa, la Alta Comisionada informará que «la Policía Nacional, acompañada por el Ministerio Público, allanó sus instalaciones, incautó equipos y detuvo arbitrariamente a su gerente general por defraudación aduanera y lavado de dinero».
PCIN coincide con informe de Bachelet
La organización Periodista y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN) coincide con el reporte de las agresiones que detalla la Alta Comisionada de Naciones Unidas. Según informó Cristopher Mendoza, directivo de la gremial, estos datos son los mismos que registra esta organización en el observatorio sobre violaciones a la libertad de expresión.
Mendoza agregó que la dictadura de Daniel Ortega «no baja la guardia» en su intento de acallar al periodismo nacional, mediante la criminalización, las amenazas y las agresiones, no obstante, dijo que los periodistas «no vamos a desistir en la decisión de seguir ejerciendo nuestra labor. El régimen va a seguir oprimiendo, pero eso no nos va a amedrentar, como no amedrentó a los periodistas el asesinato (en el 2018) del periodista Ángel Gahona».