El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró este ocho de noviembre el cuestionado proceso de comicios generales celebrado el domingo en Nicaragua «no se puede llamar elecciones. Han sido una burla». El delegado de gobierno de Pedro Sánchez reprochó que Ortega se impusiera en el poder encarcelando a presos políticos, con lo cual sepultó la posibilidad de que la oposición real compitiera, ya que encarceló a siete aspirantes presidenciales.
Albares abogó por la liberación de los más de 150 detenidos, que incluye a activistas, banqueros, empresarios, exguerrilleros sandinistas y hasta periodistas. Las declaraciones las brindó a su arribo a la Casa de América para asistir a un acto por el 70 aniversario de la Convención Asilo y Refugio y mantener un encuentro con el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi.
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«Lo que se ha realizado ayer (domingo, siete de noviembre) ha sido una burla. Una burla al pueblo de Nicaragua, una burla a la comunidad internacional y, sobre todo, una burla a la democracia», reiteró el diplomático.
«No ha habido ni elecciones libres, ni elecciones justas, ni elecciones competidas. Los opositores, aquellos líderes opositores que deseaban competir, están en la cárcel y exigimos su inmediata liberación como venimos haciendo desde el mes de agosto», agregó.
El orteguista Consejo Supremo Electoral ubicó al dictador Daniel Ortega como el «ganador» del cuestionado proceso. Con ello, Ortega ocupará nuevamente la Presidencia de Nicaragua hasta el 10 de enero de 2027. Si Ortega cumple este nuevo periodo, será el hombre que más tiempo ha estado de forma consecutiva en la jefatura de Estado de Nicaragua, serían 20 años impuesto en poder.
«No ha habido ningún tipo de verificación de esas elecciones y, por lo tanto, no tienen ninguna garantía para el Gobierno de España, como no tienen ninguna garantía para la mayoría de los países de la comunidad internacional, de la Unión Europea (UE)», enfatizó el canciller, recordando que debido a la situación que atraviesa el país se vieron obligados a llamar a consultas a su embajadora en Managua.
Recalcó que España insistirá en llevar el tema ante la UE para incidir en que lleguen medidas más fuertes contra la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.