Walter Antonio Gómez Silva y Marco Antonio Fletes, ambos extrabajadores de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH), cumplen un mes de estar presos en la Dirección de Auxilio Judicial en Managua, luego que el 28 de mayo fueron detenidos de forma arbitraria y acusados por la justicia de Nicaragua del supuesto delito de lavado de dinero, bienes y activos. Hasta la fecha, la Policía orteguista no permite que sus familiares puedan verlos. Su arresto arbitrario lo hicieron oficial el 29 de mayo.
En una entrevista el 23 de junio a medios de comunicación, María Consuelo Céspedes, esposa Walter Gómez, dijo desconocer las condiciones en las que se encuentra el ahora preso político de la dictadura, ya que no lo ha podido ver en todo el tiempo que lleva detenido.
Además, denunció que las autoridades policiales no le dejan pasar alimentos, únicamente aceptan que le lleve una botella con agua. «Solo los primeros 10 días le permitieron alimentos solidos, después permitían únicamente líquidos y tenemos dos semanas que solamente una botella con agua le dan en los tres tiempos de comida».
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«Ellos (la Policía) dicen que le dan de comer, pero yo no he podido constatar si es cierto, pero a punto de agua en estos últimos días, ¿quién puede tener una salud formidable?, nadie», reprochó Céspedes, quien aseguró que Walter Gómez «gracias a Dios» no padece de ninguna enfermedad, pero creo que de aquí va a salir súper complicado».
Policial no acata orden del juez
María Céspedes explicó que un juez le autorizó ingresar a «El nuevo Chipote» para poder ver a su esposo, pero la Policía orteguista no acata la orden. «Esperamos en Dios que nos permitan verlo, yo creía que por ser Día del Padre nos iban a permitir por lo menos traerle una comida decente, pero ni eso han permitido».
«Mi hijo escribió una carta para que mi esposo la recibiera, pero no permiten nada», agregó la esposa del excontador de la FVBCH, quien le recordó al dictador Daniel Ortega que «él es padre y lo único que le pido es que me permitan ver a mi esposo, porque ningún daño le estamos haciendo en exigir verlo; él (Daniel Ortega) sí nos está haciendo daño, porque está desuniendo a la familia».
Los familiares de Walter Gómez esperan «un milagro» para que la justicia de Daniel Ortega respete sus derechos y permita poder verlo y tener asistencia de un abogado privado.
«Frustrante no saber de Marco Fletes»
Por su parte, Pablo Fletes calificó de «frustrante» el no poder saber la situación en la que se encuentra su hermano, Marco fletes, luego de estar más de 30 días en la Dirección de Auxilio Judicial «bajo una supuesta investigación de un delito que no ha cometido».
«Hemos querido saber de mi hermano, pero ellos (la Policía) no acepta nada. Ha sido increíble para todos los familiares de presos políticos que no nos permitan verlos. No hay nada que nos haga saber que mi hermano está bien».
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«Está difícil la situación porque no permiten ni ingresar comida; en las últimas semanas solo aceptan que ingresemos agua», lamentó Pablo Fletes, quien aseguró que como familiar de Marco no claudicará en exigir su libertad.
«Seguiremos apoyando a Marco (Fletes) porque sabemos que es inocente. Él es un padre ejemplar de tres hijos y un buen esposo. Mi hermano tiene que estar libre porque lo único que hizo fue trabajar en la Fundación (Violeta Barrios de Chamorro), pero lo están tratando como un delincuente», agregó Fletes.
Para Pablo Fletes, la situación que atraviesa su hermano es un caso meramente político porque «todos sabemos que Marco es inocente de todo lo que se le acusa, esperamos que todo esto se resuelva lo antes posibles. Ya va más de un mes con la supuesta investigación y la Policía no ha presentado las supuestas pruebas que tiene; aumentaron a 90 días el proceso investigativo, al parecer lo van a llevar hasta ese límite, y no sabemos qué pasará después».
Capturas arbitrarias
Walter Gómez, quien laboraba como contador de la FBVCH, fue sacado de su casa por efectivos de la Policía al servicio dé la dictadura de Daniel Ortega. Según su esposa, María Consuelo Céspedes, una patrulla policial se presentó a su casa, aproximadamente a las seis de la tarde y sin mostrar ninguna orden judicial de captura o allanamiento obligaron a los habitantes del inmueble a abrir las puertas e irrumpieron para sacar por la fuerza al ciudadano y llevárselo.
En esa ocasión denunció que los agentes de la dictadura allanaron sin ninguna orden judicial el inmueble y ocuparon los sellos de Contador Público Autorizado (CPA) del profesional así como una computadora y varios libros contables.
En cuanto a Marco Fletes, quien fungía como administrador financiero, sus familiares denunciaron que un grupo de civiles armados lo interceptó cuando salía de una casa en un barrio de Managua, donde se resguardaba, lo lanzó al piso con violencia y luego lo llevó hasta un microbús que esperaba a unos metros del lugar de la captura y procedieron a llevárselo.
Investigados por 90 días
Luego de 48 horas de la captura arbitraria, la Policía de Daniel Ortega notificó a través de una nota de prensa que Gómez y Fletes estarían 90 privados de su de libertad bajo la figura de «detención judicial».
Según la institución policial, ambos ciudadanos fueron presentados en audiencia especial de tutela de garantías constitucionales, ante la jueza del Juzgado Décimo de Distrito Penal de Audiencias, Gloria Saavedra, quien, violando el debido proceso y el derecho a la defensa, dictó su decisión sin que estuvieran presente los abogados defensores.
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Después de la captura de Marco Fletes y Walter Gómez, la Policía orteguista encarceló en su casa el dos de junio a la aspirante presidencial y exdirectora de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, Cristiana Chamorro, todos acusados por lavado de dinero. Además ha encerrado a otros 18 opositores a los que acusa de «traidores a la patria» y de cometer actos delictivos.
Lejos de buscar una salida pacifica a la crisis política que atraviesa Nicaragua, Daniel Ortega ha calificado de «delincuentes» a los nuevos presos políticos y ha asegurado que «no dará ni un paso atrás» y que «castigará con cárcel» a todo opositor que considere su enemigo.