Cuatro líneas aéreas de las que operan en Nicaragua, definitivamente ya no vendrán al país en lo que resta del año 2020, por lo que las esperanzas de una ligera reactivación económica en el sector turismo se esfuman y las familias que pretendían viajar para pasar una navidad junto a sus parientes tendrán que esperar.
Según una promoción de los vuelos hacia Nicaragua que realiza en internet, a través de su página oficial de Facebook la agencia de viajes Aeromundo, las fechas anunciadas por las líneas aéreas son para enero. En el caso de United Airlines, de acuerdo con el calendario publicado por la agencia de viajes, tiene previsto reanudar sus vuelos el 5 de enero.
Asimismo, Copa Airlines estaría volando hacia Nicaragua el 7 de enero, en tanto Aeroméxico reanudaría sus viajes con nuestro país el 14 de enero. En el caso American Airlines sigue pendiente de confirmar la fecha del reinicio de sus viajes, no obstante, Aeromundo tiene fecha prevista para el 17 de diciembre.
Noticia relacionada: Líneas aéreas alargan una vez más llegada de vuelos a Nicaragua
Nicaragua es uno de los países de la región que tiene mayores dificultades para el reinicio de los vuelos internacionales. Pese a que el Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino está abierto desde el mes de julio del presente año, en los cuatro meses subsiguientes, solo una línea aérea ha reiniciado sus operaciones enfrentando dificultades por las severas regulaciones impuestas por las autoridades nicaragüense.
Las líneas aéreas que operan en la región centroamericana ya han reanudado sus vuelos en la mayoría de países sin embargo, en Nicaragua, según se han quejado los administradores de las empresas aéreas, las autoridades de Aeronáutica Civil en coordinación con las de Salud, han impuesto condiciones de operación muy severas, por encima de las que se han impuesto de el resto de países y eso dificulta la reanudación de los vuelos y es por ello, según declaró recientemente el expresidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP), José Adán Aguerri, que muchas operadoras de vuelos no han dado ni fechas de reinicio de sus itinerarios hacia Nicaragua. «Los grandes perdedores son el empleo, la sostenibilidad de las empresas y la imagen del país», indicó Aguerri.
De tal manera que, Avianca y La Costeña, son las únicas compañías que han reiniciado sus operaciones este año, pese a las rigurosas normas que la administración de Daniel Ortega aplica a las líneas aéreas ante el COVID-19, las que continúan obstaculizando la entrada de pasajeros y turistas al país, según ha reclamado el empresariado.
Noticia relacionada: Vuelos de Avianca hacia Nicaragua podrían cancelarse por estricto protocolo
«Mientras las autoridades no modifiquen las medidas que le exigen a las aerolíneas estas seguirán sin llegar. Es absurdo el precio que estamos pagando. Por exigir medidas que no existen en el resto del mundo, el país es condenado a mantenerse prácticamente aislado», reclamó Aguerri.
En tanto, Lucy Valenti, presidenta de Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur), declaró que «no podés alzar cabeza porque la esperanza que teníamos de poder generar algún ingreso en el cierre del año, se está esfumando con la imposibilidad que la líneas operen»
Explicó que el cierre del año es una de las dos mejores temporadas para el turismo, luego de Semana Santa, por lo que la reprogramación «es un golpe grande», indistintamente del impase que provocó la pandemia. «Vamos a cerrar el año muy mal con una caída de un 80 por ciento», alertó.
Noticia relacionada: Mayoría de vuelos de Managua hacia EE.UU. despegarán hasta octubre
Avianca es la primera y hasta ahora la única línea aérea internacional que reactivó sus vuelos hacia Nicaragua y fue recibida con «bombos y platillos» por el gobierno el 19 de septiembre, tras seis meses de estar frenados, debido a la emergencia sanitaria y el riguroso protocolo implementado por el país.
Sin embargo, la representante de Canatur detalló anteriormente que, debido a las «exageradas» normas, en el primer vuelo se quedaron unos 30 pasajeros; en el siguiente viaje 50 y en el tercer viaje, 70; lo que ponía en riesgo la continuación de sus viajes y mostraba un panorama poco alentador a las demás compañías.