Después de la publicación de una convocatoria a licitación por parte de la Policía orteguista, en la que llaman a oferentes a participar en el proceso de “Adquisición de medios de transporte para fortalecimiento de capacidades operativas de la policía”, y que cuenta con el financiamiento del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), se desató una polémica contra el banco, que incluye el levantamiento de firmas para pedir a los gobernadores de la entidad que frenen el desembolso para la Policía de Nicaragua, identificada por los peticionarios como el órgano represivo de la dictadura de Daniel Ortega.
Según la convocatoria a licitación, la institución policial comprará 17 microbuses estilo panel, dos microbuses de 30 pasajeros y 1 microbus de 25 pasajeros, así como cuatro lanchas con motor.
La colecta de firmas inició al mediodía de este miércoles, ocho de mayo y hasta el cierre de esta edición (unas seis horas) ya contaba con más de 2300 peticionarios. En el sitio web que promueve la campaña no figura ninguna persona como autor, sin embargo, Artículo 66 conoció que podría ser una iniciativa surgida de los nicaragüenses en el exilio, que están aglutinados en la diáspora, dispersa en distintos países.
Noticia relacionada: Inician campaña de boicot a Serie Internacional de Beisbol “Nicaragua vs. Puerto Rico”
“El Banco se expone a relacionarse con una institución cuyos máximos jefes, incluyendo el Primer Comisionado Francisco Díaz, ya sancionado a nivel internacional, y que además podrían ser eventualmente llevados a las cortes internacionales, acusados por cometer presuntos delitos de lesa humanidad”, dice la iniciativa.
Países bajo presión por “incoherentes”
Para Róger Arteaga, exfuncionario del BCIE (1981-2001) opinó que este tipo de iniciativas surten efecto porque “llaman la atención, para que los mismos gobernadores del BCIE y los cancilleres de los países que también conforman la OEA, (y que) no han instruido a sus representantes en el BCIE, lo hagan”.
Arteaga, evaluó como “una falta de coherencia de los países que en la Organización de Estados Americanos (OEA) votan sancionando a Nicaragua y en el BCIE votan financiando proyectos” a la dictadura de Daniel Ortega.
Noticia relacionada: Nicaragüenses llaman a boicot contra la licorera Flor de Caña
Según licitaciones encontradas en el sitio web de la Policía, el financiamiento del BCIE para la entidad se ha usado para la construcción de estaciones policiales, compra de equipos de movilización y otras para el equipamiento de edificios de tecnología.
“Policía de Nicaragua genera inseguridad”
Arteaga consideró que este tipo de financiamientos a las Policías de Centroamérica lo usan todos los países de la región que son socios del banco, “el problema es que la Policía de Nicaragua no es igual a la de Guatemala, a la de Honduras, ni a la de Costa Rica. Aquí han atropellado tanto que ya da miedo, que ya no es seguridad ciudadana, sino es inseguridad ciudadana la Policía”.
Según los organizadores de la iniciativa, su fin es “incidir sobre los directores y las instancias administrativas a desistir de esta acción que irremediablemente dañará la reputación de un banco diseñado para financiar progreso, desarrollo e integración entre la familia centroamericana”.
Orteguistas la califican de “vendepatria”
A penas la convocatoria a firmar la petición empezó a moverse en las redes sociales, los simpatizantes del gobierno iniciaron a tildarla de “golpista” y “vendepatria”, y señalaron a Juan Sebastián Chamorro, miembro de la Alianza Cívica, como el artífice.
“El maldito golpista, apátrida de Juan Chamorro sigue pidiendo afectaciones económicas para que el país se hunda. Exijamos que ese tipo se vaya de la Mesa de Negociación”, escribió uno de los voceros del régimen.
Casi en simultáneo, los orteguistas, que adjudicaron la iniciativa a Chamorro, también impulsaron una supuesta campaña digital para “exigir” que se suspendiera a Chamorro de la mesa de negociación. Artículo 66 buscó en la cuenta de Twitter del miembro negociador de la Alianza, para saber si él promovía la petición, y no se encontró ninguna publicación que reivindicara la campaña.
Todos esos epítetos que lanzan contra de los que no comulgamos con el régimen son los que los caracterizan a ellos. Asesinos y criminales que pronto les caerá la justicia encima.
Sanciones la regines asesino de Ortega y la Bruja Murrilo. vamos por mas
En Nicaragua, la dictadura no solamente se tomó todas las instituciones para demoler sin mayor retraso el Estado de Derecho , sino que también infiltró los organismos internacionales como el BCIE, el BID y el Banco Mundial; los organismos de cooperación bilateral, los organismos regionales como el SICA, las embajadas, las cuestionadas agencias de Naciones Unidas como el tristemente célebre PNUD y la OPS y algunas ONG internacionales, para poder crear esa idílica pantomima del país próspero y bonito, casi perfecto, que le vendieron a todo el mundo y que todavía hoy este gobierno inmoral y asesino sigue usando para auto-victimizarse ante la comunidad internacional.
Los mecanismos que usaron para esto no son nuevos:
1. Echaron a andar toda su maquinaria, para cabildear a favor de las candidaturas de los representantes de su preferencia y, por si fuera poco, se aseguraron de condicionar la aceptación de los nombramientos, únicamente para sus elegidos, muchos de ellos, viejos conocidos de la revolución de los 80 y otros más nuevos, amigos y recomendados de la izquierda caviar europea y latinoamericana y de los “gobiernos amigos”. Si no me creen, localicen a Carmelo Angulo ex Representante del PNUD y a Socorro Gros de la OPS y les preguntan a ambos.
2. De igual modo, pero en sentido contrario, cabildearon a favor de sus fichas y metieron en estas mismas entidades a toda la gente que pudieron. Unos en cargos de representación, otros en cargos técnicos y otros como personal de apoyo administrativo y de servicios. Algunos cumpliendo una misión de cabildeo de alto nivel a favor de la dictadura, como Joaquín Solís, un médico empleado de Gustavo Porras que actúa como interlocutor de Ortega ante Cerezo en el SICA; pero todos indistintamente actuando como operadores políticos, propagandistas y orejas comunes y corrientes, que esperan “orientaciones” para la próxima jugada.
3. En el caso de las ONG nacionales e internacionales, aplicaron la misma receta y la complementaron con el parapeto del “trabajo articulado” con las instituciones estatales, que de por sí estaban más que tomadas por los operadores de la dictadura. Solo así, y solo por mencionar un ejemplo, fueron posible las reuniones con los miembros del Comité de Prevención de la Tortura que visitaron el país para el examen periódico universal de Naciones Unidas, en las que abundaron la adulación y la ceguera, para crear la plataforma que después utilizó la delegación orteguista en Ginebra, donde, por supuesto, llegaron a reafirmar las maravillas expuestas por las ONG en Nicaragua, sobre el cumplimiento de los compromisos asumidos por el Estado en materia de Derechos Humanos.
Por todo esto no debería sorprendernos para nada la actitud colaboracionista del BCIE. Tampoco las cochinadas que desde lo oscuro siguen haciendo estos señores para favorecer a este régimen. Todos ellos, como “agentes de cambio”, son responsables de la debacle que atraviesa la cooperación en los países que dicen ayudar y, por tanto, todos ellos también son responsables del sufrimiento de la gente por su asqueroso contubernio y permisiva complacencia con los regímenes totalitarios.
No es que sean países incoherentes, son países INHUMANOS, Sinverguenzas, rastreros.
Es una vergüenza el BCIE. Me parece que van por la ruta PDVSA. Creo que no están leyendo bien el paquete de sanciones. Y para nada será bien visto ni Nicaragua ni en ninguna parte del mundo.
donde hay que firmar ,si alguien sabe??