A pesar de que el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo prohibió la movilización convocada para este sábado, 6 de abril, por la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), la guardia se tendió por diferentes zonas de Managua para asediar a los ciudadanos que pretendieran protestar contra la dictadura a través de los piquetes exprés, llamado que se hizo tras el rechazo de la tiranía de permitir manifestarse libremente a como mandata la Constitución Política de Nicaragua.
Los oficiales se encuentran ubicados en mayor medida sobre la carretera a Masaya. Los antimotines están desde la rotonda Rubén Darío hasta la rotonda Jean Paul Genie. Artículo 66 contabilizó en esa zona tres autobuses con oficiales de la dictadura y caravanas de patrullas en puntos claves como las inmediaciones del centro comercial Metrocentro y el Colegio Teresiano. Además, los ciudadanos han denunciado la presencia de motorizados merodeando los barrios de la capital.
Noticia relacionada: Unidad Nacional desiste de marchar en Managua ante amenaza de criminalización de la dictadura
La Policía también se encuentra a lo interno de Metrocentro. Aunque siguen con el hostigamiento, la población ha decidido protestar en desacuerdo con la dictadura y han salido con sus carteles y papelillos azul y blanco en forma de repudio a la administración Ortega-Murillo y así demandar justicia, libertad y democracia.
Este sábado se cumple un mes desde que iniciaron los piquetes exprés, esto ante la negativa del régimen de permitir la reunión pacífica. Los tres últimos sábados, la Policía ha respondido con secuestros y represión a los nicaragüenses que deciden levantar su voz contra las violaciones a los derechos a los humanos que está perpetrando el Estado y que ha dejado en menos de un año entre 327 y 525 asesinados.