Han pasado tres semanas desde que la misión especial del Parlamento Europeo aterrizó en Nicaragua para observar de cerca la situación de los derechos humanos en el país. Durante su visita, los diplomáticos pudieron ver a los presos políticos que están detenidos en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) conocida como El Chipote, y la cárcel de mujeres, La Esperanza. Los representantes de la Unión Europea se fueron impactados de las condiciones en las que están los presos políticos, sobre todo el caso de los periodistas Lucía Pineda y Miguel Mora, quien estaba una celda en pésimas condiciones.
Luego de esta visita y de las denuncias que realizaron muchos de los presos políticos, la dictadura de Daniel Ortega, en represalia, ordenó el traslado a una celda de aislamiento de Miguel Mora y Lucía Pineda, y las presas políticas en la cárcel La Esperanza fueron golpeadas salvajemente.
«Ortega nos garantizó que no habría represalias»
El eurodiputado español, Gabriel Mato realizó este 11 de febrero, ante el plenario del Parlamento, una denuncia de las medidas del orteguismo contra los reclusos, y cuesitionó que el mismo Daniel Ortega les prometió que no habrían represalias en contra de las y los presos políticos, pero que en pocos días ocurrió lo contrario.
«Visitamos una prisión, La Esperanza, una prisión de presas políticas que hablaron con nosotros y nos manifestaron la injusticia de su causa y el maltrato físico y moral que estaban recibiendo. Exigimos que no hubiera ningún tipo de represalias contra estas presas que se habían atrevido a denunciar lo que estaba sucediendo, lo hicimos a las autoridades penitenciarias, al viceministro y al propio presidente Ortega. Nos garantizó que no habría ningún tipo de represalia», aseguró el eurodiputado español.
Luego llamó al parlamento europeo a que tomara medidas contra estos crímenes.
«El viernes pasado nos confirman que 10 presas de una de las celdas en la que nosotros estuvimos habían sido maltratadas, golpeadas terriblemente y además les impiden ser visitadas por sus familiares. Yo creo que el Parlamento no puede mirar hacia otro lado (…) Debemos actuar inmediatamente».
Gabriel Mato, miembro del Partido Popular Europeo finalizó asegurando que «en Nicaragua estoy convencido que reina el terror, no hay libertad para los periodistas, se apalea a las presas, se mata a estudiantes».
«Los presos políticos están sufriendo un maltrato horrible»
También tomó la palabra, Ramón Jáuregui, eurodiputado que encabezó la misión de parlamentarios, y se dirigió al presidente del órgano europeo, Antonio Tajani, a quien señaló que pese a las promesas que hizo Daniel Ortega de mejorar la situación en el país, todo fue mentira y empeoró.
«Visitamos las cárceles donde prisioneros políticos están sufriendo un mal trato horrible, hay una quiebra horrible de las libertades democráticas en ese país. Y aunque el presidente Ortega prometió a la delegación que haría algo para suavizar la situación de la quiebra de la democracia, y de los derechos humanos en ese país nada está ocurriendo. Al contrario todo va a peor».
El eurodiputado, miembro del Partido Socialista Obrero Español, finalizó su intervención llamando al presidente Tajani, para que interceda ante la situación que vive Nicaragua. Los eurodiputados que visitaron el país enviaron una carta formal solicitando acciones del europarlamento.
«Señor presidente, voy a dirigirle en nombre de la delegación del Parlamento Europeo que visitó Nicaragua, una carta para que usted se dirija al presidente de ese país para exigirle respeto a las libertades y respeto a la dignidad humana en las cárceles», concluyó Jáuregui.
Me gustó el reportaje, en pocas lineas expresa la indignación que sienten los Eurodiputados, esparamos que hagan algo contundente. Ellos pueden nosotros No. El frente sandinista resulto ser una gran decepción. Para los que nacimos después de los 80 era algo que nos contaban y ahora ya lo vivimos y se reafirmo lo que el pueblo Nicaragüense lleva sufriendo por 40 años. Espero que mis hijos no pasen por lo mismo y logremos cortar a toda esa escoria de raíz.